¿En qué fijarse al elegir una silla de coche?

Todos queremos lo mejor para nuestros hijos. Sin embargo, la cantidad de sillas distintas que han salido al mercado en los últimos años puede marear a más de una familia, sobre todo a los padres primerizos. RWF, ADAC, ISOFIX, TOP TETHER... ¿Qué son estas abreviaturas tan raras? ¿Seguro que la silla del niño necesita todo esto?

 

¿Cómo elegir la mejor silla para el niño?

 

Al elegir una silla de coche, lo prioritario es que se adapte perfectamente a la estatura, el peso y la edad del niño. El siguiente criterio, igual de importante que el primero, es el de la seguridad. Otro aspecto a tener en cuenta es la comodidad, tanto del peque como de toda la familia. ¡Recuerda que la silla también debe adaptarse al asiento del coche! La misma silla podrá instalarse en algunos vehículos, pero en otros no, debido a los distintos ángulos de inclinación del asiento o la presencia o ausencia de conectores ISOFIX.

 

Reglamento R129 (conocido como i-Size): adaptación de la silla a la estatura del niño

 

El Reglamento R129 i-Size trata sobre la seguridad de las sillas de coche y hace especial hincapié en la protección en comparación con las sillas que no entran dentro de la categoría i-Size. Una de las mejoras clave en estas nuevas regulaciones es la sustitución de los maniquíes tipo P por maniquíes tipo Q durante las pruebas. Los nuevos maniquíes tipo Q están equipados con un mayor número de sensores, lo que permite una reproducción más precisa de la estructura corporal del niño y su comportamiento durante los accidentes de tráfico.Gracias a esto, las sillas i-Size ofrecen una mejor protección de las vértebras cervicales, la cabeza y los brazos del niño en caso de impacto lateral.

 

Por otro lado, este reglamento obliga a montar las sillas a contramarcha, por lo menos hasta que el bebé cumpla 15 meses y crezca hasta los 76 cm. Los especialistas de todo el mundo confirman que la posición a contramarcha protege mejor a los niños contra lesiones corporales causadas por colisiones. Además, protege mejor la columna, el cuello y la pelvis en caso de frenadas bruscas. Un ejemplo de ello es la silla I-GUARD de Kinderkraft, una de las primeras sillas i-Size de esta marca internacional.

 

También es importante mencionar que desde julio de 2013, los fabricantes de automóviles pueden solicitar la homologación i-Size para sus vehículos. A diferencia del estándar ISOFIX, la homologación i-Size no es obligatoria.

 

Una ventaja significativa derivada de la implementación de las regulaciones i-Size es el compromiso activo de los fabricantes de asientos de automóvil y los fabricantes de automóviles en el proceso legislativo. Como resultado de esta colaboración, se ha logrado un ajuste aún más preciso de los asientos de automóvil a diferentes modelos de vehículos. Esto significa que cualquier asiento de coche compatible con la categoría i-Size se adaptará a cualquier vehículo con homologación i-Size.

 

 

Instalación a contramarcha: RWF y TOP TETHER

 

Ya hemos hablado sobre RWF. No es más que una silla que se instala a contramarcha. Puede ser una silla de la antigua categoría de peso 0-13 kg o que cumpla la normativa i-Size, que se basa en limitaciones de crecimiento hasta los 15 meses y los 76 cm de estatura.

 

Ten en cuenta que una silla de coche RWF nunca se debe instalar en el asiento delantero si tiene airbag.

 

Para aumentar la seguridad de los trayectos con la silla a contramarcha, suele utilizarse el cinturón TOP TETHER si la silla no tiene pata de apoyo. TOP TETHER también se usa en las sillas instaladas en el sentido de la marcha (75-105 cm). Es un segmento de cinturón largo finalizado en gancho, que se coloca en la parte trasera de la silla de coche. Se engancha en una zona especialmente destinada para ello en el vehículo. De esta forma, la estabilidad de la silla aumenta. No obstante, acuérdate siempre de estirar el TOP TETHER, sobre todo si usas una silla giratoria.

 

Certificados: ADAC i ÖAMTC

 

No todas las sillas ofrecen la misma garantía de protección en caso de choque. Por suerte, existen varias instituciones independientes someten a las sillas a pruebas de impacto específicas en sus laboratorios. Lo más importante es que estas organizaciones no informan a los fabricantes sobre la aptitud para las pruebas, sino que les notifican después de haber elegido las sillas para probar. Por otro lado, los fabricantes tampoco les pueden pedir que comprueben sus productos. Gracias a ello, las pruebas y las valoraciones son independientes y fiables.

 

Entre las organizaciones más populares del mundo, destacan ADAC, Stiftung Warentest y ÖAMTC. En España, las sillas más comunes son las que llevan certificado de ADAC. No obstante, ten en cuenta que es una empresa alemana, por lo que su sistema de valoración es distinto al de España. De acuerdo con la clasificación alemana, cuanto más baja sea la nota, mejor. Así pues, 0,0-1,5 significa muy bien, y 4,6-5,5 muy mal.

 

La silla I-GUARD que hemos mencionado ha obtenido una nota buena en seguridad. El montaje y las instrucciones de uso han recibido una nota conjunta algo peor, un 2,8, lo que indica un nivel satisfactorio.

 

 

Resultados ADAC para i-GUARD de Kinderkraft

Seguridad	2,0
Montaje/instrucciones	3,2
Ergonomía	2,1
Ausencia de materiales nocivos	1,8
Facilidad de la limpieza	2,5

 

* Recuerda que con ADAC, cuanto más baja sea la nota, mejor. 1,5-2,0 significa bien, y 4,6-5,5 muy mal.