Termómetro sin contacto para bebés

Termómetro sin contacto para bebés

Durante la enfermedad, es importante asegurarse de que el niño esté cómodo y se sienta seguro. ¿Qué se puede hacer cuando el niño tiene fiebre? En primer lugar, hay que controlar la temperatura para saber qué medidas tomar.

 

Muchos padres recuerdan bien los antiguos termómetros. Aparte de que había que mantenerlos debajo de la axila por mucho tiempo para tomar la temperatura, también había que manejarlos con mucha delicadeza. A la hora de romperse, eran muy peligrosos ya que contenían el mercurio que es tóxico.

 

Hoy en día, con las nuevas tecnologías, no tenemos que preocuparnos por estas cosas. Podemos elegir entre muchos tipos de termómetros, entre ellos los más cómodos: termómetros sin contacto. ¿Son estos los productos perfectos? Lo comprobaremos en este artículo.

 

¿Cómo funciona un termómetro sin contacto?

El termómetro sin contacto mide la energía infrarroja. ¿Qué significa esto? El cuerpo emite radiación en la parte del espectro infrarrojo. Cuanto mayor sea la temperatura del cuerpo, mayor será la radiación. Gracias a esta tecnología es posible ver el resultado inmediatamente sin tener que tocar el cuerpo del bebé.

¿Es preciso un termómetro sin contacto?

Cada tecnología es particular. El termómetro sin contacto no proporcionará una medición tan precisa como un termómetro de mercurio clásico o un termómetro digital tipo pluma (en la axila). Éste funciona un poco diferente: se trata de medir el curso de la temperatura, es decir, controlar si la fiebre baja, sube o se mantiene. Aparte de esto, muchos factores diferentes influyen en la medición de la temperatura con un termómetro de este tipo. Es importante respetar algunas reglas esenciales para obtener una medición adecuada.

 

¿Cómo tomar la temperatura correctamente con un termómetro sin contacto?

  • La temperatura del termómetro debe ser estable, es decir, debe permanecer durante algún tiempo en la habitación donde se va a realizar la medición.
  • La temperatura ambiente debe ser constante: no realices la medición en un lugar con corrientes de aire o donde haya cambios bruscos de temperatura.
  • Sigue las instrucciones: por lo general, el termómetro está diseñado para un tipo de medición, por ejemplo, medir la temperatura en la frente (no en las sienes, en el cuello, etc.) y mantener la distancia indicada, p. ej. 2 cm.
  • Presta atención a la piel: no puede estar sudorosa, grasosa, etc.
  • Presta atención a la punta del termómetro: ¡debe estar limpia!

 

¿Es propio un termómetro sin contacto para medir la temperatura de un recién nacido y un bebé?

Sí, el termómetro sin contacto es perfecto para tomar la temperatura de los recién nacidos y los bebés. Todos los padres que han intentado medir la temperatura a un bebé muy vivo con un termómetro tradicional lo saben perfectamente... ¡A menudo roza lo milagroso! Y la medición suele resultar imprecisa. Los bebés aún no entienden que no deben moverse durante el proceso. Muchas veces el termómetro sin contacto es la única solución.

Una niña está acostada y su cara sugiere que no se encuentra bien. En su boca hay un termómetro sostenido por su madre, que con la otra mano acaricia a la niña.

 

Termómetro sin contacto: ¿cuáles son sus ventajas?

La ventaja principal y la más evidente es la posibilidad de realizar una medición sin tocar el cuerpo. Ningún otro termómetro puede medir la temperatura con precisión cuando el bebé se mueve. Mantener a cualquier bebé en la misma posición es prácticamente imposible, más aún con el termómetro (en la boca, el recto o la axila).

 

Otra ventaja es la posibilidad de realizar mediciones mientras el bebé está dormido. ¡Seguramente, todos los padres apreciarán esta solución! Durante una enfermedad es muy importante controlar la fiebre regularmente. Con un termómetro sin contacto es posible medirlo durante la noche sin despertar al bebé. Es muy importante: no hay necesidad de volver a hacer dormir al niño, todo se hace sin estrés. Y, como se sabe, el sueño es la mejor medicina para todas las enfermedades; no se debería interrumpirlo, es mejor dejar que el niño permanezca bajo su calmante influencia.

 

Otro beneficio evidente de estos termómetros es su seguridad. En primer lugar, a diferencia de los termómetros de mercurio que es tóxico, éstos son completamente inocuos. En segundo lugar, no entran en contacto con el cuerpo y, por tanto, no pueden transmitir ningún virus o bacteria. Esto sí que es posible cuando se mide la temperatura con un termómetro clásico a varios miembros de la familia.Los termómetros sin contacto son los únicos que se utilizan en hospitales y centros médicos, y esto es lo que mejor demuestra su seguridad.

 

Los termómetros modernos también disponen de unas comodidades adicionales, como por ejemplo la posibilidad de autocalibración. Gracias a ella, el termómetro se adaptará a la temperatura ambiente (este es un factor importante que influye en la medición). A menudo estos productos disponen también de la opción de apagar el sonido y de la retroiluminación de la pantalla (una excelente solución cuando el niño está dormido y no quieres despertarlo). Algunos también pueden medir la temperatura ambiente o, por ejemplo, del agua del baño o de la leche.

 

Tipos de termómetros sin contacto

Los termómetros sin contacto miden la intensidad de la radiación térmica que emite el cuerpo. Hay varios tipos de estos dispositivos:

  • Termómetros de radiación total: controlan la radiación térmica total del cuerpo.
  • Termómetros infrarrojos: controlan bandas específicas de radiación térmica.
  • Termómetros ópticos: controlan una longitud específica de las ondas de radiación.

 

¿Qué es una tendencia de temperatura?

Ya hemos escrito que un termómetro sin contacto no proporcionará resultados muy precisos (en comparación con un termómetro de líquido clásico). No obstante, controlará la tendencia de la temperatura. ¿Qué es esto? Son los cambios de temperatura durante la fiebre. Por eso se mide la temperatura, ¿verdad? ¿Quieres saber si ya es lo suficientemente alta como para darle un medicamento al niño, o si el medicamento que le habías dado funcionó y la fiebre está bajando?

 

Por lo tanto, no hay que dar tanta importancia a una sola medición, sino relacionarla con otros resultados: compara y controla el curso de la fiebre durante un tiempo.

 

En casos excepcionales -si el termómetro indica una temperatura muy alta- también puedes medirla con un termómetro de pluma, p. ej. en el recto del bebé.

Un bebé con la mano en la boca está acostado en un consultorio médico. El médico le mide la temperatura con un termómetro sin contacto: son 36,6°C.

 

Calibración manual del termómetro

¿Qué es la calibración de un termómetro? Es el tiempo que el dispositivo tarda en ajustarse a la temperatura ambiente. Por ejemplo: guardas el termómetro en un armario de cocina donde hace calor. Quieres tomar la temperatura del bebé que está acostado en una cuna en su habitación. No puedes hacerlo de inmediato. El termómetro necesita un tiempo para calibrarse. De lo contrario, la medición será errónea.

 

Hay productos en el mercado que tienen dos tipos de calibración: manual y automática. La segunda es más cómoda, ya que no tienes que configurar nada por ti mismo. Pero un termómetro de este tipo necesita mucho más tiempo para adaptarse a la temperatura ambiente. Por lo general, esto lleva unos 30 minutos. Aún así, sería recomendable comprobar si el termómetro realmente se ha calibrado, es decir, debes medir la temperatura ambiente y compararla con tu termómetro interior (si lo tienes).

 

La calibración manual es mucho más rápida: una vez que el termómetro sea calibrado manualmente, sólo se necesitarán unos segundos y estará listo para el uso.

 

Sensor de la distancia entre el termómetro y la superficie de medición

Las instrucciones suelen indicar que hay que mantener el termómetro a 2, 3 o 5 cm del cuerpo. Esto no es fácil de hacer a ojo. Una medición imprecisa proporcionará un resultado falso. Por lo tanto, es mejor elegir termómetros sin contacto con un sensor de distancia. En su mayoría se trata de una pantalla que informa sobre si la distancia es correcta. A veces también hay indicadores sonoros.

 

Si quieres obtener resultados precisos, lee las instrucciones y sigue las reglas de una correcta medición. A la hora de elegir un termómetro, comprueba dónde estuvo fabricado, cuál es su garantía y qué comodidades de medición proporciona. Hay muchos termómetros baratos en el mercado con una calidad cuestionable, así que elígelo con cuidado.

 

¿Cómo cuidar del niño durante una enfermedad?

Ya sabemos cómo controlar el curso de la temperatura. ¿Cómo podemos cuidar del niño durante una enfermedad para asegurar su confort? En primer lugar, hay que seguir estrictamente las recomendaciones del médico.

 

Si el niño tiene fiebre, podemos darle medicamentos que la bajen, son los que contienen ibuprofeno o paracetamol. La aplicación de compresas frías también resulta muy eficaz. Reducir la intensidad de la luz aliviará los ojos.

 

El dolor de garganta puede aliviarse con jarabes especiales, infusiones para hacer gárgaras, pastillas, sprays, etc. Para los bebés existen jarabes especiales, su pediatra seguramente te recomendará alguno que sea adaptado a los síntomas del niño.

 

Limpiar la nariz también es muy importante. Los niños mayores no suelen tener problemas con sonarse la nariz. Sin embargo, los pequeños no saben hacerlo, por esto hay que ayudarles a eliminar la mucosidad. Para ello se utilizan unos aspiradores nasales especiales. Es muy importante facilitar la respiración del bebé por la noche. Algunas cunas, como UNO UP y NESTE UP, tienen la función de ajustar el ángulo de inclinación del colchón. La cabeza del niño está colocada más arriba, lo que le facilita la respiración. La cuna colecho es una solución perfecta cuando el niño está enfermo: los padres siempre están al lado. El bebé tiene la paz interior sabiendo que la ayuda de la mamá o el papá está al alcance de la mano.

 

Cuando un niño tiene fiebre, suele sudar mucho. Por eso es muy importante proporcionarle una cantidad adecuada de líquidos. De lo contrario, el niño puede correr el riesgo de deshidratarse. También hay que tener en cuenta una dieta adecuada. Debe ser equilibrada y fácil de digerir, para que el cuerpo tenga fuerzas para luchar contra la infección.

 

La enfermedad de un niño es una experiencia estresante también para los padres. Sin embargo, vale la pena recordar que el estado de ánimo de los padres influye en el bienestar del niño. Por lo tanto, vale la pena intentar mantener la calma. Seguramente los padres y el niño estarán más tranquilos al estar cerca el uno del otro. En el caso de los recién nacidos, una cuna colecho es una solución perfecta. Los padres también deberían comprar un termómetro sin contacto de buena calidad para controlar la temperatura de su bebé sin perturbar su tranquilidad y sin despertarle del sueño.

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