Pañales de gasa y los multiusos: qué son, cómo ponerlos y lavarlos

Todo padre sabe perfectamente con qué frecuencia hay que cambiar al bebé y cuántos pañales usados genera y, por tanto, también cuánta basura produce y dinero necesita. Por muchos años, nadie estaba pensando en una alternativa a los pañales desechables que, podría parecer, ya totalmente reemplazaron los pañales de gasa. Hay en día, podemos observar un gran retorno de los pañales de tela no desechables. Esta solución es más barata, más ecológica y más natural. Y no requieren tanto trabajo como podría parecer.

 

¿Un pañal de gasa? ¿Y qué es eso?

Antes de la época de acceso fácil a los pañales desechables, para mantener limpios a los bebés se usaban los pañales de gasa. Esto no quiere decir que la gasa cayó totalmente en desuso. Aún se considera un elemento imprescindible de la canastilla de bebé. Solo ha cambiado su función. Hoy en día, sobre todo, se usa como un trapo, babero o una manta que se pone bajo el cuerpo delicado del bebé. Los pañales de gasa son, pues, simplemente pedazos suaves y absorbentes de 100% algodón de buena calidad. Su otra ventaja es el precio: son realmente baratos. Para muchos también será relevante que muchos de los pañales que se pueden encontrar en el mercado tengan diseños y colores bonitos.

 

¿Qué es un pañal de tela (multiuso)?

Cambiar al bebé genera enormes cantidades de pañales, si usáis los comunes pañales desechables. Pero existe una alternativa más amigable para el medio ambiente y vuestra cartera. Actualmente, cada vez más se usan los pañales multiusos aunque no necesariamente tiene que ser la misma gasa que usaban nuestras madres y abuelas. Este tipo de pañales compramos una vez, junto con un conjunto de absorbentes, y ya estamos preparados para todo el periodo en que el niño use los pañales.

 

A primera vista, en cuanto a la construcción no difieren en nada en comparación con los desechables. También tienen cierres cómodos de botones o velcro y el culito del bebé estará dentro de un material resistente e impermeable. La diferencia está en que los absorbentes de un pañal multiuso de tela no se tiran, sino, después de usarlos, los limpiamos y lavamos. Están hechos de modo que se pueden lavar muchas veces, hasta más de mil.

 

Los pañales multiuso están compuestos de dos partes: la capa absorbente (interna) y aislante/el cobertor (externa). El material aislante puede ser PUL, o sea, el poliuretano laminado o la lana.

 

Tipos de pañales de tela: ¿cuál es la diferencia entre los pañales de gasa, franela y de bambú?

Por lo general, los pañales multiuso se dividen en tres tipos: rellenables, snap in one y all in one. Los rellenables están compuestos de dos partes: la capa externa impermeable (cobertor) y parte interna delicada de tela absorbente. El cobertor parece un calzón que tiene por dentro un bolsillo especial en el cual se coloca el absorbente. Snap in one está compuesto por la parte externa (cobertor) e interna que se unen mediante unos botones especiales a presión. Su ventaja es que no es necesario cambiar al mismo tiempo el cobertor y el absorbente. Si el pañal no se manchó por fuera podemos cambiar solo el absorbente interno. Los pañales all in one son también llamados híbridos. Se puede colocar en su interior cualquier material absorbente. Podemos incluso usarlos para impermeabilizar adicionalmente otros pañales. Se pueden usar diferentes materiales en el lugar de la parte absorbente. Los más tradicionales, pero también los menos usados hoy en día, son los pedazos de gasa. Aparte de eso, se pueden usar partes de franela, de bambú, de muselina o de microfibra.

 

Pañales de microfibra

Los pañales de microfibra se consideran los más absorbentes de todos y, además, dan la mayor seguridad de que el pañal no goteará. Este material es muy bueno para los pañales tipo rellenable y para usarse en la noche.

 

Pañales de bambú

Las partes intercambiables de bambú son menos absorbentes que los de microfibra, sin embargo, son mucho más delicados: no causan ningún tipo de irritación y, además, tienen propiedades antibacterianas y antifúngicas. Igual de delicados para la piel del niño son los pañales de gasa, pero su absorbencia depende sobre todo de su gramaje.

 

Pañales de muselina

La muselina no es un tipo de tejido, sino una manera de tejer. Puede ser hecha tanto de bambú, como de algodón. Gracias a una técnica adecuada de producción, es ligera, suave e, increíblemente, delicada. Por eso, es muy transpirable. Las otras propiedades de los pañales de muselina dependen del tipo del material del cual están hechos. La muselina de algodón es mucho más delicada que la gasa y la muselina de bambú es aún más delicada que otras telas de bambú.

 

El pañal de tela y de gasa. ¿Cuál escoger?

La gasa tradicional, por mucho tiempo estuvo casi totalmente olvidada, ¡regresa triunfando! Muchos de los papás la usan, pero no por razones sentimentales, sino por sus propiedades reales. ¿Cómo gana la popularidad? Sin duda, el precio es un factor importante. Es la opción más económica entre los pañales multiusos. Pero esta no es su única ventaja. La gasa es muy absorbente y se seca rápido. Esto significa que el riesgo de que el pañal gotee es muy bajo y después del lavado se secará instantáneamente. Así que una noche es suficiente para que quede totalmente seca.

 

Entonces ¿para qué gastar mucho dinero para comprar telas más caras? Por ejemplo, porque un pañal de gasa requiere ser puesto de manera correcta o, más bien, ser amarrado, en el peque. En cambio, los absorbentes de tela se colocan dentro del cobertor. Además la tela de bambú o de microfibra tiene todas las ventajas de la gasa. Algunos tejidos tienen ciertos pros adicionales: el bambú es antibacteriano y la microfibra: increíblemente absorbente.

 

¿Cómo poner un pañal de gasa o de tela en el bebé?

Los pañales de gasa y los de tela difieren mucho en la manera de ponerse. Al decidirnos por un pañal de gasa tenemos que tener en cuenta la necesidad de aprender el difícil arte de amarrarlo: lo cual ni es fácil ni muy fiable. Hay que ponerlo realmente muy bien para poder estar seguros de que no va a gotear. El pañal de tela se pone casi igual que el desechable: hay modelos que se cierran con velcro o con botones a presión. La elección es la cuestión de vuestras preferencias.

 

Al amarrar un pañal de gasa, podemos sentirnos como si nos hubiéramos regresado en el tiempo. Según la tradición, se necesitan dos pedazos de gasa para ponerle el pañal a un bebé. El primero se dobla de modo que forme un triangulo con un vértice dirigido hacia abajo. En su centro de coloca el otro pedazo doblado en forma de un rectángulo. En este conjunto acostamos el niño. El rectángulo junto con el vértice inferior se pasa entre las piernas del bebé y los vértices laterales los unimos en la barriga. Todas las puntas se deben amarrar y ¡listo!

 

Si la efectividad es algo importante para ustedes, entonces el pañal de gasa se puede colocar dentro de un cobertor funcional, igual como en caso de los absorbentes de tela. Los cobertores se parecen a los pañales desechables y sostienen la parte interna con cierres de velcro o de botones de presión.

 

Ventajas de los pañales de gasa y de tela

La gasa es una solución económica, ecológica e hipoalergénica: por eso, no es de extrañar que otra vez se esté volviendo popular y, además, esté de moda. ¡Un niño, durante un día, es capaz de usar hasta 20 pañales! Si usamos pañales desechables puede ser un gasto bastante fuerte para el presupuesto casero. En cambio, la gasa es barata y puede ser usada varias veces. Cada pañal desechable es un nuevo residuo y otro ladrillo para la construcción de los grandes basureros que siguen expandiéndose y acumulan sustancias difíciles de descomponer y los pañales biodegradables son más caros. La gasa, en cambio, es completamente natural: es 100% algodón. Algunos de los papás la usan porque no les queda de otra, ya que el niño tiene alergia. Es porque cierta parte de los niños no acepta el uso de pañales desechables y reaccionan con una erupción cutánea: puede ser por el tipo de material usado durante la producción o por la humedad y falta de aire.

 

Desventajas de los pañales de gasa

Os preguntáis, ¿por qué la aparición de los pañales desechables fue una gran revolución y por qué las generaciones enteras dejaron de usar una solución ten perfecta como la gasa? Es porque, por supuesto, también tiene sus desventajas. Primero: poner y amarrar estos pañales toma tiempo y es difícil. Es muy probable ponerlos de manera incorrecta, lo cual puede acabar en manchar la ropa. Además, el tejido tiende a moverse, por tanto, manchar la ropa o la cama es bastante fácil. Segundo: no basta con lavar la gasa, hay que desinfectarla con agua hirviendo, secar y planchar y esto significa que vais a dedicar bastante tiempo a esto. Tercero: algunos creen que una de las ventajas de la gasa es que el niño la deja rápido y empieza a usar la bacinilla antes. Es cierto, pero ¿a qué precio? El peque siente que el pañal está mojado y se siente incómodo: la tela se pega a su culito, lo irrita y hace que el niño sienta frío.

 

Ventajas de los pañales multiusos

Estos contras no tienen los pañales multiusos de tela. Sobre todo, gracias a su cobertor. No se necesita amarrar la tela y el pañal se pone como los calzones o un pañal desechable. Además, el cobertor proporciona la seguridad de que el pañal está bien puesto y garantiza que no goteará. Además, este tipo de pañales crecen junto con los niños porque tienen una talla universal que se ajusta al tamaño del niño. A pesar de esto, los pañales de tela tienen las mismas ventajas que la gasa: son más baratas de usar que los desechables, son ecológicos, naturales y no causan alergias. Además, garantizan una buena circulación de aire, no sobrecalientan los testículos en niños varones y no contienen sustancias artificiales que puedan irritar la piel. Sin duda, también vale la pena mencionar su gran valor estético. En el mercado se pueden encontrar partes externas del pañal con diseños y en diferentes colores. Además, ¡los pañales multiusos son la tendencia de moda más reciente!

 

Otras ideas de usar los pañales de gasa y de tela

Los pañales de gasa y de tela, también, pueden ser usados por los papás que han optado por pañales desechables. Es porque tienen toda una amplia gama de otros usos muy prácticos. Son muy útiles al amamantar: para cubrirse si la mamá está dando el pecho fuera de casa y como protección del hombro cuando queremos que el niño saque los gases después de comer. También se pueden usar como un trapo universal para limpiar la carita del bebe, por ejemplo, cuando le salen los dientes y produce mucha saliva. Una función parecida tienen, por ejemplo, los protectores de los cinturones en el portabebés HUGGY de nuestra marca. Los pañales se pueden usar también durante el baño. Se pueden poner en la bañera para que el niño se sienta más cómodo o es posible usarlos como una pequeña toalla para secar la cara. Serán perfectos para colocarlos encima del cambiador o como una manta universal si queréis cambiar al niño fuera de casa. No os olvidéis de que estos pedazos de tela tienen la protección contra la radiación UV y tienen propiedades de termorregulación. Por tanto, es obvio que deben encontrar su lugar en la bolsa de cada mamá, sin importar si usa pañales desechables o multiusos. Para no tener problemas con que quepan, vale la pena optar por una bolsa adecuada: una duradera y con el espacio bien organizado. En Kinderkraft tenemos bolsas como MOMMY BAG y MOLLY.

 

Certificado de la seguridad

La seguridad de los pañales de gasa y de tela, como de todos los demás artículos para niños, es verificada. Muchas empresas disponen de un conjunto considerable de certificados que comprueban su calidad. Una base principal es la opinión positiva del Instituto de Salud Materno Infantil que pueden obtener todos los productos para niños y sus madres. Algunos de los productos tratan de obtener el certificado Oeko-Tex que comprueba la calidad de los productos textiles confirmando que en su composición no hay ninguna de las 100 sustancias más peligrosas para los usuarios. También podemos encontrarnos con el certificado del grupo SGS que confirma el cumplimiento de las normas nacionales e internacionales.